lunes, 3 de noviembre de 2014

Cuando la Actitud Depende de tu Actitud



Soy los que regularmente piensa que la actitud en la vida de un individuo es determinante en su camino hacia el éxito, estoy convencido que cuanto más y mejor alimentamos una actitud sana estamos más cerca de llevar una vida más agradable en ese camino hacia lo que queremos lograr.


Pero muy diferente a lo que muchos piensan, creo que la Actitud NO lo es todo…   muchos dicen: “La Actitud  lo es todo!”  pero no creo que sea así. Es posible que ahora mismo usted se extrañe y puede que en principio  usted esté en desacuerdo conmigo y eso es válido, pero creo que la Actitud forma parte de un todo, donde  muchos factores son imprescindibles en el éxito de una persona, pero no es el todo en si. Creo que para  poder alcanzar el éxito en algo además de un ingrediente como la Actitud, debemos tener una meta clara, si  se tiene Actitud y no se tiene meta, no avanzamos.

Ya al tener Actitud y una Meta es un avance, pero dentro de ese todo es importante contar con la  Determinación que nos empuje a comenzar el camino hacia lo que deseamos. Agreguemos a ese gran todo un poco de Disciplina y Foco en el camino que se traza para legar a la Meta y coloque un poco de Aceptación y Aprendizaje de los Fracasos…  y así si vamos formando ese TODO que identificamos generalmente como Actitud.
Muchos erróneamente asumen que ya por sólo tener una Actitud con tendencia positiva basta para que automáticamente tener todos los ingredientes que les describo, pero lamentablemente no es así, se necesita autodeterminación y tomar las decisiones necesarias para poder juntar los ingredientes del cocktail del éxito. Conozco mucha gente con Actitud Positiva y bonita, pero que no logran cosas importantes porque se quedan en una emoción de alegría sin tomar decisiones importantes donde están involucrados los ingredientes de los que les vengo hablando, en ese sentido la gente sólo se queda en ser una persona “chevere”.
Las decisiones que tomamos en la vida determinan en lo que terminamos convirtiéndonos, cuando tomamos la decisión de adoptar un comportamiento de eterno malestar, de negativismo, quejas y crítica, se afecta nuestra visión y perdemos esa estupenda capacidad que tienen los triunfadores de identificar las oportunidades., por supuesto siempre vemos el lado malo y siempre nos va mal. Es como un efecto boomerang donde nosotros mismos somos los arquitectos de nuestro propio fracaso.
Nada genera más éxito que la programación mental hacia el éxito, las batallas de la vida las ganamos o las perdemos principalmente en nuestra mente. Nadie llega a triunfar sin antes convencerse que puede lograrlo, el estar convencido en triunfar hace que seamos atrevidos y que intentemos cosas que muchos creen imposibles. Cuando regeneramos la actitud adecuada diariamente es como llenar nuestro tanque de combustible que nos moverá hacia el triunfo.
La Actitud adecuada es una decisión unipersonal de cada uno de nosotros, no depende del entorno, de las personas que nos rodean o del trabajo que tenemos…  nuestra Actitud y motivación dependen de la decisión que tomemos diariamente de programarnos hacia el éxito. Regenerar la Actitud tiene que ver con tener la determinación de escoger cosas buenas para nosotros mismos, con optar por las opciones que nos permitan ver el lado oportuno de la vida, porque nuestras decisiones nos llevan a pensamientos, que se convierten en sentimientos, en palabras, en acciones y en resultados.
Parece que se necesita una Actitud Positiva adecuada para que cada día escojamos la Actitud que deseamos; suena enredado, cacofónico y redundante, pero les aseguro que para escoger una excelente Actitud primero debemos tener la Actitud correcta!
Por: Emerson Ramírez
@emersonramirezs