Hoy en día una de las grandes preocupaciones de las organizaciones en nuestros países es el ausentismo laboral, ese ausentimo del que hablamos a diario y que afecta la producción de una empresa, la falta de trabajadores en su puesto de trabajo produciendo al máximo para el bienestar de todos.
Ese sería el tipo de ausentismo que más preocupa a las empresas en estos tiempos, pero existe otro tipo de ausentismo que no calculamos, que no auditamos y del cual generalmente nos quejamos un poco menos. Ese ausentismo del que hablo se llama Ausentismo Laboral Presencial... si! así mismo es... es un ausentismo laboral con presencia física del trabajador, suena como loco no? pero es así, es una especie de virus que ataca cada día mas a las organizaciones, es tener al trabajador físicamente en su puesto de trabajo pero mental y emocionalmente totalmente desconectado de lo que está haciendo. Esta situación es más común de lo que parece y muy posiblemente tengas en tu empresa personal con este tipo de ausentismo laboral.
Importantes estudios revelan que tener empleados justificando faltas al trabajo, ausentándose de sus labores o simplemente presentes físicamente pero ausentes emocionalmente con lo que hacen (y por lo tanto produciendo considerablemente menos), vienen generados principalmente por la misma razón, aunque son varios los factores que logran incidir en estas prácticas, una de las principales razones de estas situaciones es un pobre desempeño en el liderazgo en puestos claves de la empresa.
¿Son realmente líderes los gerentes y supervisores de su empresa? un liderazgo con desempeños por debajo de la media aumenta la desmotivación en un 60% promedio. Un líder que no esté cerca de su equipo, que no lo inspire o lo motive con miras hacia una meta en común con entusiasmo y pasión pierde el compromiso de los integrantes del equipo, por ende pierde el control del mismo. Cuando un trabajador pierde ese deseo de aportar a un equipo, pierde el entusiasmo y de esa manera no quiere estar en su puesto de trabajo ni físicamente ni emocionalmente.
La crisis más grande por la cual puede estar atravesando una empresa es por la crisis de liderazgo, la incapacidad que tienen los responsables de motivar, inspirar y guiar a los equipos para tener compromiso con la misión que tienen dentro del aparato productivo de la empresa.
La gran pregunta es ¿Cómo puedo mejorar la situación en mi empresa? - Sencillo: humanizando los procesos de su organización, 
enfocando nuestros esfuerzos en el personal para generar compromiso con la organización. Puede que muchos equipos estén desgastados, en ambientes de trabajo que no son atractivos, con los mismos beneficios, con las mismas funciones, con pocos programas de motivación y sin esperanzas de que mejore su estado dentro de su trabajo. Esa desesperanza es la que corroe los equipos si no es bien manejada por un líder efectivo, los trabajadores se sienten desmotivados, utilizados y como ciudadanos de segunda clase en la organización.
enfocando nuestros esfuerzos en el personal para generar compromiso con la organización. Puede que muchos equipos estén desgastados, en ambientes de trabajo que no son atractivos, con los mismos beneficios, con las mismas funciones, con pocos programas de motivación y sin esperanzas de que mejore su estado dentro de su trabajo. Esa desesperanza es la que corroe los equipos si no es bien manejada por un líder efectivo, los trabajadores se sienten desmotivados, utilizados y como ciudadanos de segunda clase en la organización.
Cuando estas cosas suceden, el liderazgo de la empresa deja brechas emocionales y de atención abiertas, brechas que son aprovechadas muy bien por grupos sindicales para tener al trabajador de su lado y fortalecer un liderazgo de bajo costo y de alta efectividad ya que se basa en capitalizar los errores que comete el patrón.
El trabajador necesita que le hables en los términos y lenguaje que a él se le haga familiar y cercano, que sea tomado en cuenta en los planes de metas que tenga su departamento, que su líder esté cerca de él, que se involucre en el proceso de las metas también, el trabajador necesita sentir que su líder corre el mismo riesgo de él si no se llega a la meta, necesita ser comprendido y motivado en su justa medida.
Las empresas y sus equipos son el reflejo del liderazgo que poseen, si usted está descontento con el desempeño de sus trabajadores, antes de cualquier cosa, revise el desempeño de sus líderes, ellos son el motor positivo o negativo de lo que sucede con su equipo. Si al evaluar a sus líderes sale reprobado, entonces capacítelos, dele herramientas de crecimiento también, sepa reclutarlos (en caso que esté buscando a un líder para su empresa) y permítales crecer dentro de su organización, total, al final del cuento usted como empresario también es un líder.
Emerson Ramírez
Coach - Capacitador
Conferencista
www.emersonramirez.com.ve
@emersonramirez
